Por Ángel Páez Y M. E. Hidalgo - La República
El pasado 19 de abril, durante la presentación del alegato final de Vladimiro Montesinos Torres sobre su responsabilidad por los crímenes de Barrios Altos y La Cantuta, se presentó públicamente el abogado Carlos Dávila Valdivia. Muy pocos sabían de quién se trataba. Es el hijo de Estela Valdivia Álvarez, defensora del ex jefe de facto del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN). Su aparición confirmó las versiones de fuentes judiciales y de inteligencia que informaron a La República sobre las reuniones que sostenían desde hace unos meses Carlos Dávila con Montesinos en la Base Naval del Callao.
Dávila colabora con su progenitora en el seguimiento del proceso que se ventila contra Montesinos por su relación con el “destacamento especial” del Servicio de Inteligencia del Ejército (SIE), conocido como “Grupo Colina”. Pero también ofreció sus servicios profesionales como asesor externo del Gobierno Regional del Callao durante la gestión de Alex Kouri Bumachar.
“Estela Valdivia estaba estresada por la cantidad de casos que debía defender, así que le pidió a su hijo Carlos Dávila que la ayudara con los procesos que ella atiende”, dijo un abogado allegado a la familia de Estela Valdivia que pidió el anonimato: “Incluso ha participado en varias audiencias de los juicios orales. Para cumplir con dicha función, ha tenido que visitar la Base Naval del Callao para coordinar la defensa con el propio Montesinos”.
La República contactó a Estela Valdivia y le preguntó sobre las reuniones que con su hijo Carlos Dávila mantenía en la Base Naval con Vladimiro Montesinos y sobre su relación con el Gobierno Regional del Callao. “No voy a hablar de ese tema”, contestó la abogada.
La fotografía que publicamos de la audiencia del 19 de abril de este año, confirma que Carlos Dávila se ha sumado a la defensa de Vladimiro Montesinos.
Silencio delator
Carlos Dávila tampoco respondió a las llamadas telefónicas. Y en su casa de Miraflores, su hermano Miguel Ángel negó su paradero.
“La mayor parte del año 2009 y a comienzos del 2010 trabajó como asesor externo para la Gerencia de Desarrollo Social, a cargo de Gioconda Tripi Morales”, dijo una fuente del Gobierno Regional del Callao: “Asesoraba en las licitaciones para la construcción de colegios. En el 2009 se erigieron 14 escuelas en el Callao”.
Tripi, consultada por este diario, negó conocer a Carlos Dávila y afirmó que ya no trabajaba para la Región Callao. Ahora labora para el alcalde chalaco Félix Moreno, que postula a la presidencia regional.
“Todos sabíamos que Carlos Dávila era el hijo de Estela Valdivia. En el Gobierno Regional no era ningún secreto. Pero su nombre no aparecía en planilla. El gerente general de la Región Callao, Fernando Gordillo Tordoya, era quien autorizaba los pagos a los asesores externos”.
Pero Gordillo tampoco respondió a las llamadas.
Según información obtenida por fuentes de la Base Naval del Callao, supuestamente Carlos Dávila conversaba con Montesinos sobre sus reuniones con Alex Kouri. Como lo demuestran diez “vladivideos” descubiertos por las autoridades judiciales, en los años 90 existió una relación de amistad estrecha entre Montesinos y Kouri, quien le consultaba a aquel su estrategia política sobre su futuro como candidato a la alcaldía de Lima, en las instalaciones del SIN.
Por intermedio de su vocera de prensa Irene Sánchez, el candidato a la alcaldía de Lima comunicó que “Alex Kouri no ha contratado durante su gestión a la mencionada persona (Carlos Dávila)”, pero no desmintió si eran amigos. Kouri dijo lo mismo cuando este diario reveló que su amigo el espía de Business Track (BTR), Elías Ponce Feijóo, gestionaba directamente con él los pagos para su compañía por servicios prestados al gobierno chalaco.
¿Carlos Dávila actuaba como intermediario entre Vladimiro Montesinos y Alex Kouri para que el primero le ofreciera al segundo consejos políticos? De confirmarse la versión implicaría que el candidato de Cambio Radical no ha roto definitivamente sus vínculos con el ex asesor del SIN.
Después de que Lourdes Flores Nano emprendió su campaña deslindando con la corrupción, en abierta alusión al pasado reciente de Kouri y sus contactos secretos con Montesinos, en un principio el aspirante de Cambio Radical respondió a Flores destacando que ella había defendido a acusados de graves delitos, como el empresario César Cataño Porras.
Cabos atados
Sin embargo, luego Kouri varió de estrategia. Se olvidó de atribuirle a Lourdes Flores presuntas relaciones con personajes corruptos y la desafió a debatir sobre temas municipales, como el transporte público, la lucha contra la delincuencia, seguridad ciudadana y otros. ¿El evidente cambio fue una recomendación que salió de la Base Naval?
Nacido el 12 de setiembre de 1984, ex estudiante de los colegios Laura Alba Saldaña y Santa Rita de Casia, Carlos Dávila Valdivia se graduó en la Facultad de Derecho de la Universidad San Martín de Porres.
El 23 de marzo del 2010, Dávila constituyó la empresa BCM Servicios y Constructores, con su hermano Miguel Ángel Dávila, que también es abogado, y el empresario Juan Chiarella Padilla. El capital inicial consignado fue de 15 mil 500 soles.
La formación de la compañía constructora se produjo después de la asesoría que brindó Carlos Dávila al Gobierno Regional del Callao en materia de licitaciones para la habilitación de colegios en el ámbito chalaco. La coincidencia es llamativa.
Al poco tiempo, el 26 de marzo de este año, el hijo de Estela Valdivia inscribió en Registros Públicos la compra de un vehículo BMW del año 1998. Pagó 12 mil 900 dólares. Los anteriores propietarios fueron Ivonne Urdanivia Ramírez y Oswaldo Cáceres Gutiérrez.
Tres semanas después, Carlos Dávila apareció con su madre en la Base Naval del Callao y en compañía de Vladimiro Montesinos. Fue en esa ocasión que el ex consejero presidencial presentó su libro “Sendero, alerta temprana”. La prensa no sabía en ese momento quién era Carlos Dávila, el ex asesor negado del gobierno regional chalaco, hoy defensor a tiempo completo del ex asesor.
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