Mié, 30/03/2011 - 22:28 - La República
(En Twitter: MarcoCabrera_7)
El rechazo de un sector mayoritario de la población de Iquitos hacia Keiko Fujimori tiene sus antecedentes. Loreto siempre ha defendido su territorio como si fuera de oro. Y su padre Alberto lo sabe muy bien.
Por Marco Cabrera(En Twitter: MarcoCabrera_7)
Desde la capital del Oriente Peruano los reportes indicaron que este miércoles, la candidata de Fuerza 2011 la pasó mal. Una turba trató de impedir su mitin en la histórica Plaza 28 de Julio, lugar donde hace trece años murieron varias personas que se oponían al gobierno del dictador.
24 de octubre de 1998: El Frente Patriótico de Loreto convocó para ese día una marcha pacífica, con la finalidad de rechazar la firma del tratado de paz con Ecuador, cuyo acuerdo sería suscrito el 25 de octubre en Itamarati-Brasil.
En dicho documento, que llevaría las firmas de Alberto Fujimori y Jamil Mahuad, se establece que el Perú le entrega Tiwinza y los enclaves de Pijuayal y Saramiriza (Loreto), además de la libre navegación por el río Amazonas, al país del norte.
La población loretana estaba exacerbada. Justo ese día llegaron a Iquitos el General Ruesta y Tomas Gonzáles Reategui, quienes eran agentes del gobierno encargados de organizar “La Marcha por la Paz”.
Muertos y heridos
Los manifestantes sabían que ambos estaban hospedados en el Hotel Río Grande (ubicado frente a la Plaza 28 de Julio) y decidieron hacer justicia con sus propias manos, sin importar las consecuencias.
Comenzaron tirando piedras a las ventanas (cascajos como le llaman allá) y luego se originó un infierno a más de 30 grados de temperatura. La crisis social se había desatado para evitar que Fujimori venda la patria.
Los opositores al gobierno del ex presidente se enfrentaron a la policía, incendiaron el Poder Judicial, edificios del Estado y un vehículo oficial que minutos antes había matado a tres personas cuando intentaba disuadir la protesta.
Loreto se hizo fuerte
Las manifestaciones duraron tres días y dejó como saldo varias personas heridas, más muertos, comercios saqueados y una ciudad convertida en tierra de nadie. Un contingente policial tuvo que viajar desde Lima para poner orden, pero su esfuerzo fue en vano.
Desde aquella jornada violenta, la sociedad civil organizada de Loreto no puede ver ni en paneles publicitarios a los fujimoristas y han declarado al 24 de octubre como un día muy especial para la región.
Por eso, la gente de Iquitos trató de impedir este miércoles el mitin de la candidata que, según las últimas encuestas, pasaría a la segunda vuelta junto a Ollanta Humala de Gana Perú.
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